Con el estreno de la décima entrega de la saga "Saw", los productores de la franquicia se sentaron para abordar la producción del largometraje, donde además compartieron la decisión que, si pudieran, no volverían a tomar.
En una entrevista con IndieWire antes del lanzamiento de "Saw X ", los productores ejecutivos Mark Burg y Oren Koules, admitieron que la muerte de Kramer es la única decisión creativa que habían tomado que quisieran tener de vuelta:
“Si tuviera que hacerlo de nuevo, tal vez no habría matado a Tobin Bell en 'Saw III', eso podría haber sido un error".
Por su parte, durante una entrevista con THR, Kevin Greutert, director de "Saw X", compartió:
"Creo que hay arrepentimiento. Sería mucho más fácil hacer estas películas si eso no hubiera sucedido, pero al mismo tiempo, las tres primeras fueron consideradas en gran medida las mejores de la serie "Saw". Creo que había una especie de integridad al intentar realmente hacer una trilogía y nada más. Y matar decisivamente al personaje, esa integridad, como se percibía al menos en ese momento, era bastante importante para hacer que la historia fuera grandiosa. Pero el hecho de que había que hacer más películas, lo hicimos lo mejor que pudimos, y en algunos casos, fue genial hacerlo a través de flashbacks y todo eso. Pero sí, definitivamente hay muchas ganas de no haberlo matado".
A pesar de que lo que mencionan los cineastas es cierto, la decisión de matar a Jigsaw al final de "Saw III" fue la correcta en términos de historia. Desafortunadamente, el negocio del cine es precisamente eso, un negocio.
