***CONTENIDO GRÁFICO*** (Se recomienda discreción).
Fotografías con fines informativos y educativos.
En el año 2011, Wang Shangkun, un adolescente chino, tomó la polémica decisión
de vender uno de sus riñones en el mercado negro con el objetivo de poder
comprarse un Iphone. Las consecuencias serían fatales.
Wang Shangkun.
Nacido en 1994, en la provincia montañosa de Hunan, ubicada al sur de China,
Xiao Wang Shangkun era un adolescente de 17 años con una mentalidad muy común
entre los jóvenes de su edad. Estar a la moda.
Para ese entonces, el único deseo de Wang, el cual no podía sacárselo de su
cabeza, era el de adquirir un IPhone 4, con el objetivo de alardear estos
dispositivos con sus amigos y ser popular.
A pesar de que muchos de los dispositivos de Apple se hacen en grandes
complejos en China, son pocos quienes pueden adquirirlos. Fue entonces que,
tras pedírselo a su madre y recibir una negativa de su parte, Wang encontró
una solución que, sin saberlo, lo marcaría de por vida.
Venta de órganos en el mercado negro.
En una jugada del destino, Wang se enteró que los seres humanos pueden vivir
con un solo riñón, y que existen redes clandestinas que pagan muy bien por
obtener uno de estos órganos. Wang no se lo pensó dos veces. Rápidamente, el
joven buscó a través de internet distintos sitios en los cuales poder vender
uno de sus riñones y cayó en una clínica clandestina ilegal de tráfico de
órganos. ¿El precio? 22 mil yuanes, lo que se tradujeron en 3,200 dólares.
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| Imagen ilustrativa |
Extracción de riñón.
Con el arduo deseo por el Iphone 4 en mente, Wang se sometió al extravagante
procedimiento sin que su familia lo supiese. Las condiciones con las que fue
realizada la operación aún se desconocen.
Una vez extraído su riñón, y tras recibir su paga, Wang pudo comprarse un
Iphone 4 y un Ipad 2. Todo había salido a la perfección como el joven
quería… hasta que la realidad se volvió en su contra.
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| Imagen ilustrativa |
Infección.
Al poco tiempo de habérsele realizado la cirugía, Wang comenzó a presentar
signos de deterioro en su salud. Lo cual sumado a la curiosidad de su familia
por haber conseguido el Iphone y el Ipad, culminó con Wang confesando que
había vendido su riñón.
Al ser atendido en el hospital, Wang se llevó una horrible sorpresa al
revelarse que, debido a las pobres condiciones de salud donde fue realizada la
extracción de su riñón, el joven contrajo una infección que daría lugar a una
insuficiencia renal. Lo que lo llevaría a vivir postrado en una cama
conectado a una máquina de diálisis para eliminar de la sangre las toxinas que
el riñón que le queda no es capaz de eliminar y precisando de asistencia las
24 horas del día.
La vida de Wang se vio arruinada en un abrir y cerrar de ojos, debido a un
capricho juvenil.
Repercusiones legales.
Como era de esperarse, la familia de Wang levantó una denuncia en contra de la
clínica clandestina que llevó a cabo el procedimiento. Las autoridades chinas
arrestaron a nueve personas, entre las que se encontraban los médicos que le
extrajeron el órgano y los miembros de una banda que traficaba con órganos
humanos. Los detenidos fueron acusados de causar daños intencionales y
comercio ilegal de órganos, recibiendo una condena de entre 3 y 5 años de
prisión.
Durante el proceso legal se reveló que el grupo vendió el riñón de Wang por
unos 35.000 dólares (26.725 euros), según ha indicado la agencia de noticias
china Xinhua. Al joven solo le dieron 3,200 dólares.
La familia del chico recibió una indemnización de unos 200.000 dólares.
Futuro dependiente.
Actualmente, Wang vive conectado a una máquina de diálisis y necesita
asistencia las 24 horas del día. Sus problemas de salud obligaron al
joven a dejar los estudios y depende de beneficios sociales para sus cuidados
médicos.
