***CONTENIDO GRAFICO*** (Se recomienda discreción).
Fotografías con fines informativos y educativos.
El 30 de abril de 1998, Daniel V. Jones, un hombre de 40 años de edad, estacionó su camioneta en el circuito de transición de Harbor Freeway a Century Freeway en Los Angeles, California. Como parte de su protesta contra las organizaciones de mantenimiento de la salud, el hombre decidió quitarse la vida.
Antecedentes.
Daniel Victor Jones nació el 15 de abril de 1958, procedente Long Beach, California. Trabajaba como empleador de mantenimiento en el Hotel Renaissance en Long Beach, un trabajo en el que había estado empleado desde 1995. Vivía en un pequeño bungalow de dos dormitorios en un callejón en Long Beach. Vivía solo con su perra Gladdis, una mestiza de Labrador-whippet de siete años.
Problemas de salud.
En abril de 1998, a sus 40 años de edad, Jones sufría tanto de VIH como de cáncer. Sus vecinos y compañeros de trabajo desconocían que tuviera algún problema de salud. Jones le confió a un amigo a principios de abril que había encontrado un crecimiento de color carne en su cuello. Al principio, los médicos no estaban seguros de su causa, pero luego confirmaron que era cáncer. Jones creía que su aseguradora de salud lo estaba engañando y también le dijo a su mejor amigo que era seropositivo.
A fines de abril de 1998, Jones creía que iba a morir y decidió quitarse la vida de una manera que diera publicidad a su situación. Creía que no era culpa de nadie más que de él mismo por meterse en su situación. Más tarde, se citaría a Jones diciendo:
"No estoy contento con lo que le está sucediendo a mi situación y voy a llamar la atención de cualquier manera que pueda. Mi objetivo principal es que nadie más que yo salga lastimado".
Suicidio.
El jueves 30 de abril de 1998, alrededor de las 3:00 p. m., Jones estacionó su camioneta Toyota gris oscuro en el circuito de transición de Harbor Freeway (I-110) a Century Freeway (I-105) en Los Ángeles ( 33°55′53.1″N 118°16′50.1″W ). Se sentó en la parte delantera de su camioneta con su perra Gladdis. Comenzó a apuntar con una escopeta cargada a los autos que pasaban por la autopista, lo que provocó que los automovilistas lo denunciaran a la policía.
El propio Jones llamó al 911 en 2 ocasiones y reveló que estaba emocionalmente angustiado por las organizaciones de mantenimiento de la salud (HMO) y las circunstancias que rodean su VIH. Dijo que tenía dolor debido al maltrato por parte de la HMO a cuyo cuidado lo habían puesto. Se quejó de que le tomaría un mes programar una cita con un médico y otro mes obtener los resultados de una prueba. Como se confirmó más tarde, además de ser VIH positivo, Jones también sufría de cáncer. Duras llamadas, disparó varias balas con su escopeta, una de las cuales atravesó el techo de su camioneta. Luego, las autoridades cerraron las dos autopistas, impidiendo que alguien se le acercara. Jones permaneció en su camioneta todo el tiempo, mientras la policía y los helicópteros de noticias monitoreaban sus movimientos.
La primera llamada al 911 se hizo a las 3:05 pm del jueves mientras Jones estaba estacionado en el cruce de las autopistas Harbor y Century en lo alto de South-Central Los Angeles.
“Hola, 911. Estoy en la autopista en este momento y detuve el tráfico. Estoy como lanzando bombas incendiarias”, dijo desde su teléfono celular. “Simplemente asusté a un montón de gente”.
Jones dijo que llevaba un cóctel Molotov, un tanque de propano y una bomba casera dentro de un bidón de gasolina de cinco galones, todo lo cual podría “realmente estropear este paso elevado”. Pero en repetidas ocasiones dijo que no quería lastimar a nadie.
“Esperé hasta que el tráfico estuvo perfectamente despejado”, dijo. “Había un buen cuarto de milla entre el auto detrás de mí y yo. Me detuve. Lancé mi primera bomba incendiaria. Eso llamó su atención, por lo que se detuvieron y ahora el tráfico realmente está comenzando a retroceder. Pueden pensar que soy un lunático, pero, ya sabes, es una locura hacer esta mierda”.
El operador le preguntó varias veces si quería hablar sobre lo que le molestaba, pero él se negó y se limitó a decir:
“No estoy contento con lo que está pasando en mi situación y voy a llamar la atención sobre esto de la forma que pueda”.
La segunda llamada telefónica al 911 se produjo poco antes de las 3:38 p. m:
“Hola, 911”, dijo de nuevo. “Soy el idiota sentado en medio del paso elevado de la autopista con una gran bomba”.
Jones dijo que iba a dejar caer una mochila azul sobre el muro de la autopista y le prometió al despachador que no contenía ningún explosivo. “Tiene una cinta de video que explicará las cosas un poco mejor”, dijo.
Más tarde dijo que aunque tenía una escopeta, no le dispararía a nadie. “No me acercaré”, dijo.
Hubo un momento de confusión en la cinta cuando el despachador dijo que el camión que estaba mirando en un monitor era negro, mientras que Jones insistió en que era gris.
“Ese no es su camión entonces”, dijo el operador.
"Bueno, ¿Cuántas personas tienes sentadas en medio de un paso elevado?" preguntó Jones.
“Hay alguien más en el 5”, dijo el despachador.
“¿El 5? ¿En realidad?".
El Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles, El Equipo de Armas Especiales comenzó a reunirse y se colocó en posición a su alrededor. Luego, Jones metió la mano en una mochila que poseía y sacó ropa y una cinta de video. El hombre comenzó a arrojar los artículos sobre el borde de la autopista. Luego, salió de la camioneta y caminó por la autopista vacía.
Jones desplegó una gran pancarta cuadrada con letras blancas que decían:
"¡Los HMO están en esto por el dinero! Viva libre, ame seguro o muera".
Hizo la pancarta específicamente para la ocasión y la mostró a los helicópteros de noticias para que la vieran. Como hacía bastante viento en la interestatal en ese momento, Jones colocó un contenedor sobre la pancarta para evitar que se volara. Continuó haciendo gestos obscenos y regresó varias veces a su camioneta para acariciar a su perro.
Mientras las autoridades se preparaban para negociar con él, Jones repentinamente regresó a su camioneta y se sentó en el asiento delantero. Con la intención de quitarse la vida, encendió un cóctel Molotov dentro de su camioneta. El vehículo estalló repentinamente en llamas y fue incendiado. Sin embargo, Jones salió del vehículo y cruzó corriendo la autopista mientras estaba envuelto en llamas y humo, con el cabello, los pantalones y los calcetines en llamas. Trató de apagar las llamas y logró quitarse los pantalones.
Jones continuó deambulando luciendo aturdido y desorientado. Caminó hasta el borde de la autopista gesticulando enojado. Parecía como si estuviera a punto de saltar de la autopista; sin embargo, cambió de opinión y se alejó del borde, antes de regresar a su camioneta en llamas.
Momentos después, alrededor de las 3:50 p. m., Jones recuperó su escopeta de la parte trasera de la camioneta y luego cruzó la autopista. Colocó la escopeta debajo de su barbilla, apretó el gatillo y se pegó un tiro. Luego cayó al suelo con las cámaras aún rodando y reproduciendo el evento en vivo para los espectadores que miraban en casa. Como era un jueves por la tarde, fue presenciado por muchos niños, cuyas caricaturas extraescolares habían sido interrumpidas para transmitir el incidente. Jones murió 15 días después de cumplir 40 años.
El enfrentamiento entre Jones y la policía había durado cerca de 50 minutos. A la policía le preocupaba que aún hubiera una bomba o varias trampas explosivas dentro del camión. Por lo tanto, dudaron en mudarse. Mientras tanto, el camión continuó ardiendo con el perro de Jones todavía atrapado dentro. Finalmente, la policía se acercó al camión y registró el interior. Encontraron los restos de varios cócteles Molotov, varios cartuchos de escopeta y los restos carbonizados del perro, que había muerto en el incendio.
La cinta de suicidio.
Durante el enfrentamiento, Jones había arrojado una cinta de video sobre el muro de la autopista. Cuando las autoridades lo recuperaron y vieron el video, se descubrió que se trataba de una nota de suicidio grabada en video por Jones el día anterior. En el video, se sentó en su sofá junto a su perro y dijo:
"No voy a luchar contra la enfermedad. Ha afectado mi sistema neurológico. No voy a terminar loco".
Una fuente policial que vio el video dijo que Jones se quejó de que tenía dolor. La cinta de video explicó las motivaciones de Jones y culpó de su suicidio. Según los informes, dice en el video:
"Soy hombre muerto" y se despide declarando: "¡Nos vemos!".
El video fue filmado el miércoles, el día antes de que Jones se suicidara. No estaba dirigido a nadie. En la cinta, Jones identifica a un médico pero no a una HMO.
Cuando se le preguntó sobre el video, el teniente de policía Anthony Alba se negó a proporcionar más detalles. Dijo que a la policía le preocupa que los identificados en la cinta puedan estar en riesgo de que alguien les guarde rencor.
“Era un hombre desesperado que simplemente renunció a la vida”, dijo Alba.
Controversia.
Debido a que el suicidio de Jones fue presenciado por niños, muchos criticaron la práctica de las estaciones de televisión de Los Ángeles de transmitir en vivo las persecuciones policiales. El incidente provocó una ola de críticas sobre las transmisiones de noticias en vivo, proponiendo cambios en la forma en que se manejarían en el futuro.
Un total de siete estaciones de televisión transmitieron en vivo el suicidio de Jones. Tanto el canal 5 de KTLA como el canal 11 de KTTV habían interrumpido la programación infantil para cubrir el suicidio, mientras que el canal 4 de KNBC había interrumpido The Rosie O'Donnell Show.
Tanto KNBC como KTLA tenían sus cámaras más ajustadas a la cobertura, por lo que los espectadores pudieron ver el suicidio gráfico en detalle. KNBC emitió una disculpa diciendo:
"No anticipamos las acciones de este hombre a tiempo para cortar, y lamentamos profundamente que cualquiera de nuestros televidentes haya visto esta tragedia en nuestro aire".
La estación, así como la afiliada de Fox Broadcasting , ofrecieron a los televidentes números a los que podían llamar para recibir asesoramiento. KTLA también emitió un comunicado que decía:
"KTLA comparte con sus televidentes su angustia".
El canal 2 de KCBS-TV pasó a una toma amplia antes de que Jones se quitara la vida porque, según los informes, estaban preocupados por su comportamiento errático. El canal trajo a un psicólogo al estudio más tarde ese día para mantener una discusión en vivo sobre la angustiosa cobertura de los medios en vivo. Más tarde emitieron una declaración que decía:
"Este es el peligro de la televisión en vivo, debes estar alerta y debes estar listo para retirarte de inmediato".
Según los informes, el canal 9 de KCAL-TV recibió aproximadamente 120 llamadas durante la transmisión antes de que Jones incluso se quitara la vida, solicitando a la estación que cortara la historia antes de que las cosas se salieran de control.
Una de las transmisiones:
Reportaje (subtítulos dentro de YouTube):
