***CONTENIDO GRAFICO*** (Se recomienda discreción).
Fotografías con fines informativos y educativos.
Robbie tenía solo 8 años cuando lo violaron, ataron a un árbol y le prendieron fuego en Splendora, Texas. Doce años después sucumbió a sus heridas, pero no antes de nombrar a su atacante como un niño de 13 años que lo había agredido sexualmente dos semanas antes.
Robbie se despertó sintiéndose emocionado. Usó parte del dinero de su cumpleaños para comprar fuegos artificiales y luego planeó caminar por el bosque en la parte trasera de su casa que conectaba el vecindario de Crossno con otro donde vivía su amigo. Robbie había recibido una tienda para su cumpleaños y su madre, Colleen, la había instalado en el jardín trasero para que Robbie y su amigo pudieran tener una fiesta de pijamas. “Fue realmente uno de los días más felices de su vida. Realmente amaba sus cumpleaños ", recordó Colleen.
En esta fatídica tarde, que debería haber sido un día de celebración, Robbie fue brutalmente atacado en el bosque mientras se dirigía a la casa de su amigo. Fue atado a un árbol antes de ser empapado en gasolina y prendido. Cuando la cuerda ardió y Robbie se liberó del árbol, logró tambalearse a casa en una bola de llamas y colapsar en la calle. Colleen descubrió a su hijo, ampollado más allá del reconocimiento y apenas aferrándose a la vida.
Robbie fue llevado de urgencia al hospital. Sufrió quemaduras de tercer grado en el 99% de su pequeño cuerpo. Solo las plantas de sus pies permanecieron intactas. A sus padres les dijeron que no sobreviviría, pero milagrosamente lo hizo.
Después del ataque, Robbie nombró a Donald Collins, de 13 años, como su atacante. Donald era un depredador sexual local que vivía cerca de la familia Middleton. Colleen a menudo le había advertido a su hijo que no se acercara a Donald y que si alguna vez lo veía solo, que huyera. Fue arrestado y pasó varios meses en detención juvenil, pero finalmente fue liberado debido a la falta de evidencia y motivación.
En los años venideros, Robbie soportó más de 200 operaciones. Esperaba dejar atrás su trauma y seguir adelante y simplemente ser feliz. "El pasado es el pasado. Tienes que dejarlo ir ”, dijo Robbie con optimismo. Sin embargo, sus órganos sufrieron graves daños por el incendio y, a la edad de 20 años en 2011, Robbie falleció por un cáncer causado por las terribles quemaduras. La causa de la muerte fue declarada un homicidio.
Solo 17 días antes de su fallecimiento, Robbie hizo una deposición de video de 27 minutos durante la cual nombró a Donald como su atacante una vez más. Sin embargo, esta vez, Robbie reveló que dos semanas antes del impactante ataque, Donald lo violó en el mismo bosque donde más tarde lo incendiaría. Finalmente, se reveló una motivación.
“Me llevó al bosque donde me quemé, pero antes me bajó la ropa y comenzó a violarme ”, recordó. De hecho, tres años después del ataque, Donald había sido condenado por agredir sexualmente a otro niño de 8 años.
Robbie describió cómo había estado caminando por el bosque cuando Donald se arrastró detrás de él y le echó un gas en la cara. Describió cómo logró tropezar a través del bosque y en la vía pública cerca de su casa. "Don me agarró por el hombro y me arrojó gas a la cara, después de eso no recuerdo nada", recordó Robbie.
Durante el video, Robbie también revela que mientras estaba en llamas, creía que también escuchó la voz de un adulto que estaba hablando con Donald.
Después de la muerte de Robbie, Donald fue arrestado y acusado como adulto de asesinato capital. En el momento del ataque, uno tenía que tener al menos 14 años para ser certificado como adulto. Sin embargo, años después, eso cambió. El abogado defensor de Donald, Tay Bond, dijo que trasladar el caso a un tribunal de adultos violaba los derechos de Donald porque la ley de 1998 no permitía que se certificara como adulto. Los fiscales, sin embargo, dijeron que el asesinato no tuvo lugar hasta 2011 y en este punto, menores de 10 años podrían ser juzgados como adultos.
“Cuando Robert murió, pensábamos que tal vez nunca pasaría nada, tal vez alguien se saldría con la suya. Ha sido un largo camino ”, dijo Colleen.
Durante el juicio, Colleen le dijo a la sala del tribunal que Robbie había pasado sus últimas semanas en la tierra preocupándose de que pasaría el resto de la eternidad en el infierno. Estaba tan preocupado por la otra vida que se negó a mirar poco más que dibujos animados por temor a que una trama fuera picante. "Le diría: 'Eres la mejor persona que conozco, no vas a ir al infierno, Robert'", declaró.
Gordon Pranger, quien había conocido a Robbie durante su recuperación, dijo que Robbie le confió que le preocupaba ir al infierno porque había sido violado. "A pesar de que no tenía otra opción para que sucediera, creo que sintió que eso era pecado de tener relaciones sexuales antes del matrimonio, a sus ojos. Creo que de ahí viene su idea de ir al infierno ”, dijo Gordon.
Varios testigos declararon que Donald les había confesado que él era el responsable del ataque contra Robbie. El niño de 8 años que Donald había agredido sexualmente también testificó que después del asalto, Donald había amenazado con quemarlo si le contaba a alguien lo que había sucedido.
En otro testimonio, Heather Marie White, cuya madre estaba casada con el primo de Donald, dijo que Donald le había confesado que "él y Rex lastimaron a Robbie". Rex era el tío de Donald y se habían planteado preguntas durante años sobre su posible participación. Negó las acusaciones y los fiscales dijeron que no creían que él estuviera involucrado.
La familia de Robbie siempre ha creído que un adulto también estuvo involucrado en el ataque. “Creo absolutamente que había un adulto en el camino. Pero el Sr. Collins nunca dirá quién era. Y es por eso que no siento pena por él ”, dijo Colleen.
En 2015, un jurado condenó a Donald por asesinato y lo sentenció a un máximo de 40 años. El depredador estaba tras las rejas donde pertenecía, todo gracias a Robbie, quien se negó a ser silenciado, incluso en la muerte.
