Recientemente nos enteramos que el carismático Freddy Krueger, se encuentra entre una serie de propiedades que se dice que Warner Bros. está negociando para retener.
De acuerdo a un informe de Puck, el estudio está en negociaciones para evitar perder los derechos nacionales de "A Nightmare on Elm Street", "Beetlejuice" y "Little Shop of Horrors", entre otros. La terminación de los derechos de autor es parte de la Ley de derechos de autor de 1978, que amplió la vida de los derechos de autor.
Según la ley, los creadores que transfirieron sus derechos de autor a otra persona o entidad pueden solicitar su rescisión después de 28 años. El éxito al hacerlo ha sido algo mixto, ya que las corporaciones a menudo argumentan con éxito que las obras se hicieron por contrato, lo que significa que la empresa es el creador original y que el escritor o artista nunca tuvo los derechos para vender.
El artículo describe las terminaciones de derechos como una bomba de relojería para los estudios, lo cual no es una caracterización del todo injusta. En una industria cada vez más dominada por grandes IP, y donde las secuelas, spin-offs y remakes están generando cientos de millones de dólares mientras que las nuevas propiedades son difíciles de lanzar, los estudios deben tener cierta preocupación por la práctica. Puck también cita franquicias como "RoboCop" como potencialmente en juego pronto. Dependiendo de los acuerdos individuales alcanzados por los creadores, los estudios están a solo unos años de tener que renegociar, o potencialmente perder, cosas como "Beetlejuice" y "A Nightmare on Elm Street", las cuales han generado mucho dinero para los estudios a lo largo de los años.
Las secuelas de "Beetlejuice" siempre están aparentemente a solo un par de pasos de ser realmente hechas. Uno podría preguntarse razonablemente si la terminación de los derechos se convierte en parte de esa conversación y del proceso de negociación. "A Nightmare on Elm Street" no ha tenido una nueva entrega desde 2010, y en este punto, el líder de la serie icónica, Robert Englund, probablemente sea demasiado viejo para estar ansioso por volver a usar todo ese maquillaje. Eso significa que el estudio se verá obligado a reconstruir por completo la franquicia para la próxima entrega... pero es poco probable que eso los desaliente de querer aferrarse a ella.
En los próximos años, muchas de las propiedades más grandes de la década de 1980 podrían estar sujetas a la terminación de los derechos de autor, y eso podría cambiar fundamentalmente la forma en que suceden algunas de estas secuelas, remakes y "recuelas".
