DYBBUCK. La caja maldita.



La caja Dybbuk es el nombre que se le ha dado a un mueble para almacenar vinos que se encuentra habitada por un Dybbuk; un espíritu judío.

La caja alcanzó fama luego de que fuera rematada en EBay junto con su aterradora historia.

La caja se remonta a finales de la Segunda Guerra Mundial cuando su propietario original, un sobreviviente del holocausto polaco, huyó a España y luego a Estados Unidos. El sobreviviente falleció en el 2001 y un restaurador de muebles compró la caja en un remate.

La nieta del sobreviviente le contó al comprador que la caja había estado en el cuarto de costura de su abuela y nunca era abierta ya que un Dybbuk (un espíritu maligno según el folclore judío) vivía en su interior.

Se cree que el Dybbuk de origen judío, son almas sin paz que no han sido aceptadas ni siquiera en el “Gehena”, termino hebreo para referirse al infierno o que han sido expulsados por cometes crímenes tan graves. Pecados fuera de nuestra imaginación y tan espeluznantes que el simple hecho de saberlos, podrían cambiar nuestras mentes para siempre.

El Dybbuk, es capaz de poseer a un ser humano o cualquier criatura viviente. Se cree que es el alma de un difunto que no ha encontrado paz y sigue buscando cumplir su objetivo que una vez tuvo en vida.




La palabra Dybbuk se deriva del hebreo que significa “adhesión”. Haciéndole honor a su nombre, este ser maligno se adhiere a las personas, para cumplir su objetivo. Esta alma al convertirse en un demonio, su objetivo deja de ser algo común, buscando siempre la oportunidad de adherirse a alguien para seguir llevando a cabo actos diabólicos y funestos. De los cuales toma fuerza su posesión. Y una vez cumplido su objetivo, se dice que abandona el cuerpo al que ha poseído.

El restaurador de muebles le ofreció devolverle la caja a la nieta, quien sufrió una crisis de nervios y se negó a aceptarla.

Al abrir la caja el comprador encontró que contenía dos monedas de centavo de 1920, un mechón de cabello rubio, un rulo de cabello castaño y una pequeña estatua que tenía grabada la palabra hebrea "Shalom".




Todos los dueños de la caja han informado sobre extraños fenómenos que la rodean, pesadillas horribles, enfermedades extrañas, infartos, enrojecimiento de los ojos, vómitos y la aparición de insectos en las habitaciones.

El restaurador de muebles fue el responsable de causarle un ataque al corazón a su madre y que su negocio tambaleara.

También han comentado sobre un olor a amoniaco que proviene de la caja y pesadillas que involucran a dos horribles ancianas con los ojos sumidos junto a la caja. Iosif Neitzke, la última persona en rematar la caja en EBay, sostenía que la caja era la causante de la aparición de luces y fuegos en su casa y de que se le cayera el pelo.

Según el relato del siguiente comprador anónimo, quien volvió a poner la caja a la venta poco después de hacerse con ella, cuenta que a los pocos días después de tenerla en su casa empezaron a sucederle toda clase de desgracias que culminaron con una caída masiva de pelo. “Algo poco habitual para un joven veinteañero con buena salud”, contó él mismo en eBay.

La caja cuadruplicó su precio y el próximo en obtenerla fue el director de un museo en Misuri, Jason Haxton. Quien tampoco se libró de la maldición, y contó a una periodista los efectos del objeto.
Al día siguiente de recibirlo en la oficina despertó con el ojo derecho como si le hubieran pegado. Y eso no es todo. También sufre de fatiga, nota un sabor metálico en la boca, así como una constante congestión nasal y tos. Intrigado por el asunto, Haxton rastreó la historia de la caja y dio con un currículum algo extraño para un simple baúl de tamaño reducido.




Al parecer la caja había pertenecido a un coleccionista de antigüedades y pequeño empresario de Oregón llamado Kevin Mannis, que la compró en un mercadillo organizado por sus vecinos 2000. Según el propio Mannis, su anterior propietaria fue “una anciana de 103 años”. Media hora después de comprarla su tienda de antigüedades quedó arrasada por “una fuerza misteriosa”. Entonces Mannis, sin duda un hombre con poco aprecio por sus familiares, decidió regalarle el objeto a su madre.

Al poco, esta sufrió un infarto y hasta quedó muda por un tiempo: la señora acabó devolvíendole el regalo a su hijo con una nota que rezaba “asco de regalo”. El vástago volvió a poner la caja en subasta, ahí fue cuando Nietzke la compró, y cuenta que sufrió una plaga de insectos, problemas de visión, pérdida de pelo y todo tipo de líos con aparatos electrónicos.

Actualmente la caja pertenece a Jason Haxton, quien la tiene oculta pues no desea que nadie más viva las horribles experiencias. Cabe mencionar que nadie ha podido exorcizar al demonio de la caja.




E. NYGMA

Escritor y fundador de ZD TERROR. Amante de lo macabro y oscuro, de lo absurdo y del humor negro. Influenciado por artistas tales como Stephen King, Edgar Allan Poe, Darren Bousman, Rob Zombie, James Wan, Marian Dora, David Lynch, Quentin Tarantino, Christopher Nolan, Zack Snyder, entre otros. Futuro cineasta.

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